Y es extraño, porque parecía mucho más difícil de lo que ha resultado ser esta primera parte de lo que me gustaría que fuese algo así como: "Borrón y cuenta nueva".
viernes, 27 de mayo de 2011
domingo, 15 de mayo de 2011
Corrí hasta muy lejos, mucho tiempo...
Porque me acabo de dar cuenta de que mi primera relación seria ha sido algo muy parecido a la parte de la peli Forrest Gump en la cual echa a correr sin ningún motivo...
Simplemente cuando empiezas no te lo planteas, pero cuando estas en ello piensas "Bueno, ya que estoy aquí ¿por qué no ir un poco más lejos?" y así sucesivamente, un mes y otro y otro y otro más...
Y al igual que él, a medida que iba conociendo gente nueva iba perdiendo del todo los pensamientos del principio y corres por correr, y un día decides parar... y la respuesta es esa, estás cansado.
El correr así porque sí no tiene sentido... no lo tenía al principio pero era algo nuevo y puede que interesante, ves las partes buenas; con el tiempo si no has encontrado un sentido a esa carrera empiezas a cansarte, es una carrera hacia ningún lugar, corres y punto, eso no sería malo si la sensación fuese la del principio, pero no, cada vez estás más y más cansado de correr y de que alguien esté pendiente de ti mientras lo haces.
Una serie de personas esperan cosas de ti que no eres capaz de ofrecerles, otras dan por echo una situación que no va a ser así continuamente, pero solo tú lo sabes y no lo compartes... porque claro, harías mucho daño y no puedes justificarlo. Al final te conviertes en una especie de Kamikaze, mantienes una situación que sabes que va a hacer daño a tu entorno, pero sobretodo el que más vas a sufrir eres tú...
Al final un día te paras, de golpe, después de conseguir la valentía necesaria para aguantar las críticas, la culpa, la desilusión y el dolor... el tuyo y el de los demás. Estás cansado y dolorido, pero lo que te toca es curarte las ampollas y seguir, andando, esta vez.
A veces pasa...
Quizás algún día vuelva a echar a correr y puede que esa vez encuentre un motivo para seguir corriendo, no tenga que retirarme e incluso llegue a la meta...
Simplemente cuando empiezas no te lo planteas, pero cuando estas en ello piensas "Bueno, ya que estoy aquí ¿por qué no ir un poco más lejos?" y así sucesivamente, un mes y otro y otro y otro más...
Y al igual que él, a medida que iba conociendo gente nueva iba perdiendo del todo los pensamientos del principio y corres por correr, y un día decides parar... y la respuesta es esa, estás cansado.
El correr así porque sí no tiene sentido... no lo tenía al principio pero era algo nuevo y puede que interesante, ves las partes buenas; con el tiempo si no has encontrado un sentido a esa carrera empiezas a cansarte, es una carrera hacia ningún lugar, corres y punto, eso no sería malo si la sensación fuese la del principio, pero no, cada vez estás más y más cansado de correr y de que alguien esté pendiente de ti mientras lo haces.
Una serie de personas esperan cosas de ti que no eres capaz de ofrecerles, otras dan por echo una situación que no va a ser así continuamente, pero solo tú lo sabes y no lo compartes... porque claro, harías mucho daño y no puedes justificarlo. Al final te conviertes en una especie de Kamikaze, mantienes una situación que sabes que va a hacer daño a tu entorno, pero sobretodo el que más vas a sufrir eres tú...
Al final un día te paras, de golpe, después de conseguir la valentía necesaria para aguantar las críticas, la culpa, la desilusión y el dolor... el tuyo y el de los demás. Estás cansado y dolorido, pero lo que te toca es curarte las ampollas y seguir, andando, esta vez.
A veces pasa...
Quizás algún día vuelva a echar a correr y puede que esa vez encuentre un motivo para seguir corriendo, no tenga que retirarme e incluso llegue a la meta...
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